Se calcula que Europa perdió aproximadamente el 50% de su capacidad industrial. El sector agrícola asimismo se vio afectado; se perdieron cosechas enteras, y el apetito, erradicada en Europa desde el siglo XVIII, apareció de nuevo. Sin embargo, la enorme potencia económica y también industrial resultó ser USA, sus escenarios de producción eran inalcanzables, a pesar de que Alemania, en un año tan nefasto como 1944 logró alcanzar cantidades record de producción. Tal era la aptitud económica de Estados Unidos que aprobó la Ley de Préstamos y Arriendo que proporcionó recursos económicos, armamento y suministros a los países de la Commonwealth y a la Unión Soviética. La Unión Soviética logró un heroico esfuerzo a nivel industrial, aunque tratándose de un régimen dictatorial, más de un par de millones de trabajadores soviéticos fueron encerrados en campos de trabajo denominados Gulag. Por otra parte, también es esencial destacar la esencial contribución de los trabajadores rusos en las fábricas de los Urales, cuyo esfuerzo permitió proporcionar el material preciso para que las tropas soviéticas lograsen resistir en lugares como Moscú o Stalingrado.
El gran potencial industrial estadounidense, unido a las importantesreservas petrolíferasy dematerias primascontroladas por el Imperio británico, les dio una gran ventaja logística. Los aliados, que contaban con una mayor extensión y pluralidad territorial, no padecieron exactamente las mismas adversidades que Alemania y Japón. El enorme potencial industrial estadounidense, unido a las importantes reservas petrolíferas y de materias primas controladas por el Imperio británico, les dio una gran virtud logística. Un aspecto fundamental de la economía estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial fue el incremento de las regulaciones y controles gubernamentales sobre la economía.
Costes De La Primera Guerra Mundial Para Los Distintos Paises
En conjunto, la Segunda Guerra Mundial, costó aproximadamente unos 120 billones de dólares de 1945. Lo que no afirma es que los iluminatis, entre ellos Prescott Bush, padre y abuelo de presidentes gringos, construyeron el nazismo y financiaron a Hitler, y que el Banco Internacional de Pagos logró fluír capitales antes y durante la guerra al banco Reichbank de Hitler. De forma que los 60 millones de fallecidos fue un negocio de éstos desde ideologías y pretextos planeados por unos enfermos que precisamente triunfaron 300 millones de millones de dlls por el evento. Al final, asaltaron las reservas de oro a la mitad del planeta con la amenaza de la bomba atómica. Los trabajadores alemanes eran supervisados por el Frente Alemán del Trabajo y por la Empresa de Alimentos del Reich. Los supervisores eran casi exclusivamente integrantes del Partido Nazi, lo que indica que la producción y en consecuencia al economía se hallaban bajo control del Gobierno.
La política nazi dictaba que el pueblo alemán había de estar bien alimentado, por lo que cantidad considerable de alimentos de los países ocupados fueron enviados para su consumo en Alemania. Los países que se hallaban bajo el dominio del Tercer Reich sufrieron un terrible empobrecimiento, pese a que los jerarcas nazis hablaban de hacer una unión económica europea que mejorase el nivel de vida. Esto no resultó ser cierto, la ocupación resultó un lastre, numerosos países de Europa occidental se vieron obligados a dar entre un cuarto y una tercer parte de su recaudación y Alemania se quedó con buena parte de su producción agrícola. Todo lo mencionado provocó un horrible incremento de la inflación e hizo que brotase el mercado negro. En el punto 2 relativo a los alimentos, de nuevo Estados Unidos nutría a todos sus Aliados salvo China.
Diccionario Económico
El PIB de los Estados Unidos medró a un ritmo del diez% de forma anual en los años de la guerra. En 1945, el país se había convertido en la fábrica del mundo, controlaba 2/3 de las reservas mundiales de oro y era acreedor de todos y cada uno de los países, incluido la Unión Soviética. De a poco el gran imperio británico empezaba a depender a nivel económico de fuerzas ajenas para lograr seguir su campaña de guerra, incrementando sus niveles de deuda y debilitando su producción interna. Para 1944, Enorme Bretaña solo tenía la capacidad de construir 5,000 tanques, mientras que USA o Alemania superaban su producción en un 250%. Los gobiernos centralizaron y controlaron férreamente el sistema productivo, con el consiguiente menoscabo de la iniciativa privada de los tiempos de paz.
Al charlar de prisioneros de guerra y trabajadores forzados hay que hablar de la Organización Todt, construída por el ingeniero nazi Fritz Todt. La Organización Todt, cuyos trabajadores vivían en régimen de esclavitud, se encargó de la producción de material bélico tal como de la construcción de bases de submarinos y de las defensas ribereñas del llamado Muro Atlántico. Por contra, la economía estadounidense salió reforzada y experimentó un espectacular auge, especialmente en su ámbito industrial, con un desarrollo del producto interior bruto en torno al 10% anual. El país americano se había transformado en el mayor distribuidor de productos manufacturados a los aliados, a quienes había concedido esenciales cantidades de dinero con apariencia de créditos.
La Enorme Depresión empezó en octubre de 1929, cuando el mercado de valores estadounidense colapsó. Eventualmente formó parte de la lucha económica mundial que duró hasta principios de la Segunda Guerra Mundial. En 1932, el desempleo en Estados Unidos había alcanzado la cifra jamás antes vista del 30 por ciento. Pese a los programas del New Deal (“Nuevo Trato”) de Franklin D. Roosevelt, la economía estadounidense estuvo sumergida en la Gran Depresión durante la década de 1930. A lo largo de la Segunda Guerra Mundial, la economía de Estados Unidos se recobró merced a la producción de guerra, que originó la creación de millones de nuevos puestos de trabajo.
Desde ese entonces la victoria dependería de la combinación de población, recursos y tecnología que nutren la industria de guerra. Es por ello que las potencias Aliadas vencieron en 1918 y ahora en la Segunda Guerra Mundial, Alemania y el El país nipón que están en desventaja en oposición al resto de las potencias en dicha combinación, apostaron a un golpe rápido y destructivo. Golpe que les permitiría anular la capacidad de sus enemigos y capturar los elementos, industrias y trabajadores que le dieran el beneficio. Alemania temerosa de que los problemas internos tengan la posibilidad de desprestigiar su régimen y ocasionar una revolución interna como la que ocurrió en la Enorme Guerra, sostuvo en su población un nivel de vida relativamente prominente. Donde la producción era llevada a cabo por la mano de obra esclava de los campos de concentración.
La guerra no sólo dejó millones de muertos, sino que produjo una debacle económica. Perdió el 50% de su aptitud industrial, tal como gran parte de sus líneas férreas, rutas y centros de comunicaciones. Queda claro que la economía fue un factor clave en la victoria de los socios, cada materia prima, cada fábrica, cada trabajador y cada soldado son determinantes en el resultado de un enfrentamiento armado. Hubo empresarios que apoyaron apasionadamente la causa aliada, como el estadounidense Andrew Higgins, un ingeniero que diseñó las lanchas de desembarco que se utilizaron en numerosas operaciones anfibias como el Día-D. Higgins se encargaba de sostener motivados a sus trabajadores, colgaba imágenes de Hitler, Mussolini y también Hirohito sentados en los lavabos de sus fábricas con una leyenda que rezaba “Venga, hermano, cada minuto que tú pasas ahí dentro es tiempo ganado para nuestra causa”.
La Economía Como Campo De Guerra De La Segunda Guerra Mundial
La economía estadounidense, sin embargo, emergió de la Segunda Guerra Mundial no solo íntegra, sino más bien próspera. Los éxitos de la economía estadounidense durante la guerra permitieron que el país surgiera como una superpotencia económica una vez que finalizara la guerra y surgiera la paz. El llamado a filas dio empleo efectivamente a la mayoría de los jóvenes masculinos de la nación, y muchos de ellos mandaban la mayoría de su sueldo a su hogar. Las ganancias anuales aumentaron drásticamente y la economía estadounidense a lo largo de esta guerra empezó a emerger tras una década de depresión.